ACTUALIDAD Esta enferma la Sociedad sonorense, luego a los males de la violencia, suicidios y desenfreno sexual ahora hay que sumarle la ludopatía denuncia el Obispo Felipe Padilla Cardona.

La sociedad está enferma y, cuatro síntomas de ello son los casos de violencia --donde quiera que se generen--, frecuentes casos de suicidios, la proliferación del desenfreno afectivo-sexual y, la aparición de un problema nuevo y grave: La ludopatía, aseveró el Obispo Felipe Padilla Cardona. Aunque en Sonora “hay muchos casinos abiertos” que fomentan aquella enfermedad social, “estamos a tiempo de atajarla y buscar caminos para que esos juegos no deriven en un mal social crónico”, expuso el titular de la Diócesis de Ciudad Obregón. Lamentó Monseñor Padilla los reiterados casos de violencia que se registran en la entidad, sean de índole intrafamiliar --ya han generado nueve muertes de niños en lo que va del 2013-- o de cualquier tipo, así como los altos índices de suicidios, renglón en el cual Guaymas, por cierto, tiene el nada honroso primer lugar por número de habitantes. “El reto que debemos enfrentar todos, como sociedad, es despertar conciencias y no dejar solos a los padres de familia con esas problemáticas”, dijo, al hacer “un fuerte llamado de atención a la iniciativa privada, a los tres niveles de gobierno y a la propia iglesia”, para que estén cerca de las familias que las padecen. La Iglesia católica ya hace su parte al acompañarles y escucharles porque en la medida en que se sanee a la familia se coadyuvará a que los niños y los adolescentes tengan un entorno sano, sin conflictos de aquella naturaleza, subrayó el Obispo para el Sur de Sonora. Reiteró que la ludopatía es la nueva tendencia que se debe atender en forma conjunta, como sociedad, antes de que torne en una enfermedad más seria; ya hay síntomas, sostuvo, de que afecta a sectores vulnerables de la comunidad, al existir disponibilidad de máquinas de juegos de azar al alcance de los jóvenes y los niños. La sociedad está enferma y, es muy preocupante; debemos atajar esos males con valores y trabajando en ello todos juntos como sociedad: empresarios, gobierno e iglesia, unidos en torno a las familias, sostuvo Padilla Cardona.