ECOLOGIA Clausura obras PROFEPA en Ónavas

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) clausuró tres obras mineras a “gambusinos” en el ejido San Antonio de la Huerta, en el Municipio de Ónavas. Inspectores de la PROFEPA dieron cumplimiento a la orden decretada para clausurar el predio El Villoro, de dicho Municipio, al finalizar el procedimiento administrativo iniciado hace unos meses. Con éste sumaban cinco los predios clausurados en donde los mineros no tienen derecho para extraer el oro de placer hasta que tramiten el Manifiesto de Impacto Ambiental que emite la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT). Para la extracción del mineral, los trabajadores debieron remover algunas hectáreas de tierra con lo afectaron varias especies de la flora de la región, como mezquite y brea, pero lo hicieron sin la autorización correspondiente.

Posteriormente los inspectores descubrieron que en un par de predios más se realizaban trabajos similares, el primero de ellos fue al margen del Río Yaqui, en el mismo Municipio de Ónavas donde se encontraba un campamento para extraer el mineral de un banco de materiales de 2.8 hectáreas. Por tal motivo se procedió a clausurar el lugar y se aseguraron dos máquinas retroexcavadoras, dos cribas y cuatro plantillas de lavado de materiales. La misma situación se encontró en el predio “Toros guachos”, aledaño a la localidad de Tónichi, Sonora, donde se aseguraron siete bombas de agua, una planilla de lavadero y una criba, además de la clausura temporal total del sitio. Actualmente la PROFEPA tiene abiertos once procedimientos administrativos contra igual número de ejidatarios de dicha región y se analiza la posibilidad de interponer denuncias penales ante la Procuraduría General de la República, (PGR).