jueves, 19 de julio de 2012

AGRICULTURA Benefician las lluvias al nopal

Aun cuando el calor es uno de los factores detonantes para el desarrollo de la cochinilla en el cultivo de nopal, las lluvias han beneficiado para que este hongo no se desarrolle más en las cactáceas afectando su rendimiento. Según información del Campo Experimental Norman E. Borlaug se tienen establecidas poco menos de 100 hectáreas, en el Valle del Yaqui donde han prevalecido las variedades para nopal verdura, que con las que más problema presentan para la cochinilla rosada. Desde hace meses los productores del nopal han aplicado repelentes naturales para controlar esta enfermedad, pero sin duda no hay nada mejor que lavar las pencas ya que este hongo se cae; y así es la misma función que realiza la lluvia. Al igual que el nopal, el cultivo de soya también ha sido beneficiado por las lluvias, ya que así se controla de una mejor manera la plaga de la mosquita blanca que constantemente oviposita en la planta para desarrollar nuevas poblaciones. En el caso de soya, la lluvia también ayuda a que la planta se lave y que con ello se pierdan los huevecillos que la ninfa pueda haber dejado en la hoja para que finalmente se conviertan en larvas de mosquita blanca, lo cual ocasiona que se produzca mielecilla o fumaginas, lo cual reduce los rendimientos de la oleaginosa.

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