miércoles, 11 de julio de 2012

SEGURIDAD Urgen a regular compra de chatarra

Vecinos de la cabecera municipal de Escuinapa, Sinaloa solicitaron a las autoridades locales implementar algún programa para regular a los comerciantes de chatarra y diversos artículos, ya que a su consideración fomentan los robos a unidades vehiculares y casas habitación. "Cómo es posible que los negocios dedicados a la compra de chatarra estén abiertos las 24 horas del día, o que a todas horas anden por la calles anunciando que compran radiadores, pilas y un montón de cosas, quién vigila que los artículos que compran no son robados", manifestó un vecino que pidió la omisión de su nombre por temor a represalias, y al cual recientemente le robaron la tubería de su domicilio. Señaló que como muchos vecinos de su colonia, el robo de tubería, pilas de carros y demás es una constante y aunque dan parte a la autoridad municipal poco se hace, prueba de ello es que se siguen cometiendo este tipo de delitos y que gran parte del material termina comercializado en estos comercios.

Durante las últimas semanas los robos de pilas, partes de carros, cobre, tubería de agua potable y hasta los medidores del agua son objetos de robo, y lo más probable es que sean comercializados en este tipo de negocios ante la falta de atención por parte de las autoridades, mencionaron. Otra de las situaciones que expusieron es el abuso que este tipo de comerciantes al que someten a la población debido a que nadie los revisa, ya que mientras que una pila tiene un costo de más de mil 500 pesos, éstos la comprar a 100 pesos o menos, aún y cuando se encuentren en buenas condiciones y pues podría ser robada, aunado a que las básculas que portan para pesar el material en lo general están "arregladas".

Consideraron que si no hay quien compre objetos robados, tampoco habrá quien los robe, y quien pida mordidas tal y como hacen algunos elementos de Tránsito cuando los ven circular por las calles con las camionetas cargadas de chatarra, por lo que urgen a hacer las revisiones pertinentes. "Lo malo de esto oiga, es que hasta se burlan de la gente, porque presumen que compran hasta DVD's, ya operan hasta como casas de empeño, porque en su mayoría son cosas robadas y lo que da es impotencia porque no hay nadie quien se encargue de meterlos en cintura", expresó otro vecino.

Exhortaron a la Dirección de Seguridad Pública y a la Procuraduría de Justicia a implementar revisiones en este tipo de negocios y validar si realmente la mercancía que compran es "chatarra" o si por el contrario fomentan la el adquirir aparatos útiles que pudieran ser el resultado de algún robo.

Se quejan en Ensenada de recicladoras piratas

Ante la competencia desleal de las recicladoras ilegales, los centros de almacenaje han bajado sus operaciones y ganancias hasta en un 70 por ciento en los últimos cuatro años, aparte de la devaluación del costo de los metales. En entrevista con el propietario y la encargada de dos distintos centros de acopio de materiales metálicos, ambos coincidieron en que la proliferación de los puntos de reciclaje clandestinos, no permite que sean concentrados bajo la regularización y legalidad necesaria. Tal es el caso de Ignacio Ruiz Vargas, quien durante 32 años se ha dedicado al almacenaje, compra y venta de metal, hoy señala que este trabajo es absorbido por los irregulares, mismos que no tienen la estructura o mecanismo para evitar la recepción de algún producto robado.

Se calcula que existen alrededor de 40 sitios con tales características, ubicados comúnmente en la periferia de la Zona Urbana de Ensenada, a excepción del poblado de El Sauzal, porque está expuesta al tránsito de las corporaciones policiacas. Para crear una nueva recicladora clandestina, basta con instalar una pesa y tener espacio en el patio de un domicilio o terreno baldío, además de operar sin los lineamientos que establecen las instituciones de ecología municipal o estatal.

A pesar de que se encuentra regular su empresa, Ruiz Vargas señaló que no se integró al grupo de recicladoras que trabajan en coordinación con la subprocuraduría de Zona Ensenada, por lo que ha estado en riesgo su integridad, a pesar de no ser responsable. Cada vez que llega al establecimiento una persona para vender alguna pieza o materiales de metal, primeramente se revisa que no sea propiedad de alguna empresa o institución, como por ejemplo, los medidores y tapas de la Cespe o cableado eléctrico de la CFE.

En el caso de que el producto no parezca de dudosa procedencia, se pide a la persona que firme una nota en la que se especifican las características del mismo, además se le pide la credencial de elector u otro documento oficial con fotografía. Cuando se trata de la compra y venta de vehículos, agregó que al cliente se le pide además el documento que acredita la propiedad del mismo, mientras que se verifica con personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) el número de serie ante reporte de robo.

Se protegen de incurrir en delitos

Asimismo , Cindy Rochín Manríquez, administradora de otra recicladora, mencionó que para evitar la compra de metales producto de algún delito, se han instalado videocámaras en los alrededores del depósito y sus oficinas, con memoria por hasta 30 días. Cada vez que se acerca un interesado en la venta de alguna pieza o material, se le solicita que firme una nota descriptiva, presente alguna identificación oficial como la de elector, aparte de la acreditación de propiedad del mismo, en casos como los automóviles chatarra. Rochín Manríquez precisó que cuentan con las herramientas para protegerse ante alguna irregularidad, además de una constante coordinación con la PGJE, aunque ésto no les ha permitido avanzar sobre el declive en sus ingresos económicos y materiales en la recicladora desde el año 2008.






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Archivo del blog