COMUNICACIONES Y TRANSPORTES.- Promesas del gobierno federal de agilización de trámites para viajeros particulares, comerciantes y empresarios hacia al Norte de Sonora y más allá de la frontera, fueron incumplidos; cientos de horas-hombre se pierden en el Punto de Revisión de Querobabi y en garita de Nogales.
Los reclamos que por dos semanas interpuso la Cámara Nacional del Autotransporte (CANACAR) y diversos congresos de organismos empresariales, que demandaron mayor fluidez a sus productos—generalmente perecederos—de exportación, cayeron “en vacío”: las “colas” de unidades automotrices en ambos lugares, eran ayer exageradamente largas.
Voceros de aquellas organizaciones indicaron que el PRECOS que el Ejército mexicano opera en Querobabi, constituye un lastre para la productividad dado que es auténtico “embudo”: La tarde de ayer no menos de 240 tráilers y unos 40 autobuses de pasajeros, constituían fila de varios kilómetros. Es que, aún con los pregonados equipamientos de Rayos X y Gama, el personal castrense prefería realizar las revisiones en forma “artesanal”, supuestamente en busca de drogas u otras mercaderías prohibidas.
Incluso, los autos de particulares tardaron no menos de una hora para cruzar tal impedimento oficial; el “vía crucis” decembrino se acentúo en la puerta nogalense, dado que sonorenses en tránsito hacia Arizona fueron retenidos hasta cuatro horas, hasta que les permitieron cruzar sus vehículos. Productores agrícolas de Sonora y Sinaloa, cuyas cargas tienen plazos perentorios para cruzar a territorio estadounidense y llegar a sus nichos de mercado, lamentaron incumplimiento de palabra por parte del Gobierno federal.
Con tal estado de cosas, dijeron, corren el riesgo de grandes pérdidas económicas, en caso de que, por la tardanza en trayecto, sus productos incumplan regulaciones que impone la Agencia de Alimentos y Medicamentos (Food and Droug Administration) para su internación a territorio norteamericano.
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