INVESTIGACION TECNOLOGICA .- Tres miembros del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) ganaron el primer lugar en el concurso Nacional de Investigación Social y de Opinión Pública que lanzó este verano la Cámara de Diputados, esto al presentar su trabajo “Una evaluación de políticas públicas, el impacto de Oportunidades en México y sus diferentes regiones”. El doctor en Economía, Joaquín Bracamontes Nevárez, detalló que este trabajo, que realizó en conjunto con los doctores Mario Camberos Castro y Luis Huesca Reynoso, ha sido el resultado de un análisis de un problema que han estudiado desde hace 20 años: la pobreza.
“Encontramos eso, un impacto realmente marginal del programa en el contexto de crisis global, a pesar del esfuerzo que se ha hecho, de que los recursos se han estado incrementado, el impacto ha sido marginal y la política social no pudo evitar que los niveles de pobreza se incrementaran en nuestro país”, dijo el investigador.
Respecto al impacto que el programa federal Oportunidades ha tenido en el país para la disminución real de la pobreza, el investigador señaló que se llegaron a conclusiones clave en este tema; la primera que sí ha tenido un impacto, pero no el esperado, que existen problemas de focalización en la entrega de recursos y que este programa podría tener más éxito si tuviera ajustes.
Según estudios multianuales, la pobreza en México, en sus tres niveles -alimentaria, de capacidades y patrimonial- se ha incrementado, de un 12.7% añ 15.6% (cifras de 2006), aunque la aplicación de Oportunidades evitó que 2.73% de los hogares mexicanos cayeran en pobreza.
En el norte -incluye todos los estados de la frontera norte y las dos Bajas- la pobreza alimentaria creció de 6.1% a 7.8%, pero el programa federal evitó que 0.6% de los hogares cayeran en pobreza alimentaria, resumió Bracamontes Nevárez.
Parte del problema que el investigador comentó es que hay una mala focalización, es decir: personas que deberían estar en el programa están fuera, y otras que no deberían están inscritas. A nivel nacional en 2002 esas cifras alcanzaron un 75%, mientras que en el norte 87.4%; y en 2008 esos niveles fueron de 68.8% en México y 83.6% en el estado.
Bracamontes Nevárez agregó que en el caso de la inclusión, es decir, las personas que no pobres dentro del programa, en el país durante 2002 alcanzaron el 8.6% de los benefi ciados, en Sonora el 19%; estas cifras en 2008 a nivel nacional se elevaron a 16.9% y en la zona norte de 22.6%.
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