La ex diputada federal detalló que antes no había tope, pero en el ciclo 2012 la cuota de pesca de curvina es de 4.5 toneladas por lancha. Para los trabajadores de la pesca del poblado Golfo de Santa Clara, ubicado al sur de este municipio, dijo que lo anterior equivale a menos de un 50 por ciento de la captura de años anteriores.
“Con esto no sólo son los pescadores y sus familias los afectados, porque la misma economía del poblado pesquero está en peligro”, enfatizó la ex legisladora. Santos Ortiz expresó que las autoridades argumentan que la restricción a la pesca es para protección y prevalencia de la pesca sustentable, así como el cuidado del medio ambiente.
“Los pescadores saben que al contrario, si la curvina y el camarón no se pescan, se mueren y es mejor que sean aprovechados para el beneficio del mismo poblado”, indicó. Agregó que los trabajadores del sector afirman que si no se atrapan los volúmenes de años anteriores, disminuirá la oferta y aumentarán los precios, en perjuicio de la población en general.
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