Están en riesgo 553 mil empleos: Canacero

INDUSTRIA DE TRANSFORMACION.- La industria metal mecánica está en riesgo de perder 553 mil empleos directos y no concretar, entre otras cosas, un plan de inversión de 12 mil 500 millones de dólares, si no se concede la suspensión definitiva que derivaría de un amparo colectivo de trabajadores del sector en contra de dos decretos del Ejecutivo federal que eliminan los aranceles del sector siderúrgico, lo cual ha fomentado una competencia desleal con países asiáticos, principalmente China. De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (Canacero), el balance para el sector en su conjunto registra una caída de 6.1% del valor de la producción.

"Las importaciones asiáticas han provocado que México esté viviendo un proceso de desindustrialización que ya le ha costado a la industria manufacturera tres puntos del PIB; es decir la industria es cada vez más pequeña". Tereso Medina, dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Metal Mecánica, expuso en entrevista que el próximo 27 del presente se me realizará la audiencia incidental, luego de que un juez otorgó el pasado 9 de febrero la suspensión provisional a los decretos referidos. De resultar un fallo contrario a los demandantes, se irán a la quiebra varias empresas que han sido afectadas por la competencia comercial ventajosa de países asiáticos, principalmente por la importación de manufacturas con acero, que ha ocasionado en los últimos 10 años la pérdida de unos 700 mil empleos.

Medina, quien también es presidente de la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados, explicó que el amparo colectivo promovido por su sindicato, se promueve en defensa del interés legítimo de los trabajadores de la industria-metal-mecánica y sidero-metalúrgica, ante la pérdida de empleos que ocasiona la desgravación arancelaria impulsada unilateralmente por la Secretaría de Economía. El diputado sostuvo que el Gobierno federal debe considerar que no existe un tratado comercial, con China como lo existe con Estados Unidos o Canadá, y que no se debe permitir que se desgraven aranceles para unos y se aumentan para otros.

"Nosotros no queremos un Estado paternalista, ni complacencia ante la mala calidad de los productos, lo que pretendemos es que se ponga en marcha una auténtica política industrial el gobierno donde trate con justicia a todos los inversionistas nacionales y extranjeros y puedan actuar bajo regulaciones justas y equitativas, así como competir sanamente con el producto del acero". "Pretendemos sensibilizar al Gobierno federal sobre los graves riesgos que implica asumir una política oficial de defensa a las importaciones de países con los que México no tiene tratados comerciales, sobre todo, cuando éstos países, como el caso de China, violan abiertamente las reglas internacionales de libre comercio".